La ruta Pro de los Panama Papers arranca con el hallazgo de más de 30 empresas offshore con sede en paraísos fiscales bajo el control del dueño de un fondo de inversión investigado en la Argentina por lavado de dinero. Sigue por un grupo de empresas que se llaman Pro, como Pro-Enter, Pro-IDS, Pro Entertainment y Pro Entertainment Holdings. Pasa por la Productora Ideas de Sur del conductor y empresario Marcelo Tinelli en la calle Olleros, pasa también por la Bombonera de la Boca, y salpica a Andrés Ibarra, un ministro clave del Gabinete nacional e íntimo colaborador desde hace más de una década del presidente Mauricio Macri.
El fondo de inversión denunciado por lavado de dinero por la AFIP y luego por la Procelac (Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos) actualmente investigado por la Justicia Federal se llama Hope Funds. Su accionista principal y CEO es Enrique Blaksley. Su nombre figura en el centro de un entramado de más de 30 empresas offshore concentradas en Panamá y las Islas Vírgenes Británicas. Así surge de los documentos del estudio panameño Mossack Fonseca, que detectó y analizó Página/12 en el marco de la investigaciaón impulsada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung. Según las denuncias, Hope Funds no puede justificar el origen de sumas millonarias que ha invertido en distintas empresas porque muchos de sus inversores resultaron insolventes, no declararon y no podrían justificar el dinero que invirtieron. El año pasado, después de 18 allanamientos, Blaksley fue indagado por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado. La causa sigue abierta.
Hope Funds es un importante accionista de una empresa de marketing deportivo llamada Proenter. A partir del 2011, y hasta el año pasado, Proenter manejaba el merchandising del club Boca Juniors, primero a través de una empresa con ese nombre y después con otra llamada Ilmen. Ilmen tiene el mismo domicilio y los mismos directores que Proenter, pero distinta razón social. Mientras Proenter declara estar dedicada al mercadeo y la promoción de eventos y espectáculos, la razón social de Ilmen, según el boletín oficial de la ciudad, es la “comercialización de materiales de construcción”. Ese mismo año 2011 Hope Funds se convirtió en accionista de Proenter, participación que se extendió a Ilmen cuando ésta asumió los negocios con Boca. Blaksley, el CEO de Hope Funds, dijo al diario La Nación, en mayo de 2012, entrevistado por Carlos Masoni: “somo dueños del merchandising de Boca Juniors (todo menos la camiseta y la estática) y de la licencia de las escuelas de fútbol”. En marzo del 2015, un aviso promocional en el blog oficial de Hope Funds, blog.hopefunds.com, dejaba saber que Proenter e Ilmen forman parte del “Grupo Hope Funds” que maneja el fondo inversor. “Poseemos una importante plataforma de inversión. Una de las alternativas que ofrecemos se concentra en el rubro de entretenimiento, abarcando la realización de eventos, adquisición de derechos deportivos, licencias de marca y de merchandising, como así también en el rubro artístico y gastronómico. Además participamos en la producción de contenidos audiovisuales de calidad internacional. Las empresas de este rubro pertenecientes al grupo Hope Funds son: Pro Enter, para sus productos Sociedad Expansiva, dedicada a la explotación de los derechos comerciales de organizaciones e instituciones deportivas y culturales; Ideas Sport e Ilmen, empresa responsable de la comercialización de las licencias del club Boca Juniors”, dice el anuncio. El acuerdo duró hasta mediados del año pasado, cuando el club dejó de tercerizar la comercilización de sus licencias.
En ese tiempo Andrés Ibarra, Presidente de Marketing de Boca, era el máximo responsable de los negocios con Ilmen y Proenter. Ibarra, el ex gerente de Socma, Sideco, Correo Argentino y Autopistas del Sol del grupo Macri, ex polifuncionario del gobierno porteño bajo la jefatura de Mauricio Macri, había sido llevado a Boca en 2004 por el propio Macri, entonces presidente del club, para ocupar la gerencia general. En 2006 Ibarra llevó a Boca como jefe de Seguridad a Jorge “El Fino” Palacios, el ex comisario procesado por encubrimiento en la cuasa AMIA y primer jefe de la Policía Metropolitana creada por Macri. Casi al mismo tiemo fue acusado de llevar al espía Ciro James al Ministerio de Educación, donde Ibarra ocupaba una subsecretaría cuando fue contratado en esa dependencia el espía procesado junto a Palacios por escuchas ilegales. Tras su paso por la gerencia de Boca, Ibarra ascendió a la comisión directiva integrando listas del oficiaismo en sucesivas elecciones internas, desde donde se adueñó de la titularidad de la Comisión de Marketing con el aval del hoy presidente del Daniel Angelici, sindicado por Lilita Carrió como el operador judicial de Macri y del entonces tesorero Orlando Salvestrini, otro ex gerente del grupo Macri y a la vez ex presidente de Boca Crece SA, la empresa que manejó el merchandising en Boca hasta la llegada de Proenter. Aunque ocupó varios puestos importantes en el Gobierno de la Ciudad, de subsecretario a ministro, Ibarra siempre mantuvo la presidencia de Marketing en Boca, cuenta Jaime Rosemberg en un artículo del diario La Nación publicado en 2013. “Modificaron el estatuto para que con las firmas de Macri y la de él (Ibarra) se pudiera aprobar casi cualquier cosa”, lo criticó en ese texto el sindicalista y dirigente boquense opositor Roberto Digón, quien también le endilgó a Ibarra el manejo de la barrabrava.
Aunque la publicidad del merchandising de Boca sigue figurando de manera prominente y reiterada en la página web de Proenter (Pro-enter.com), la relación entre la empresa y el club habría terminado a mediados del año pasado, cuando Boca dejó de tercerizar y asumió la comercialización de sus licencias. “Las principales marcas deportivas de nuestro país nos eligen para el desarrollo de sus licencias de merchandising. En Argentina Boca Juniors representa el 70 por ciento del mercado en licencias deportivas”, destaca Pro-enter. (También dice representar a Newell’s Old Boys, Unión de Santa Fe, Los Pumas, los All Blacks, los Springbocks, las selecciones argentinas de voley y de básquet, los principales equipos de fútbol de Brasil, el campeoato argentino de Rally, las carreras de ciclismo La Doble Bragado y la Vuelta de San Luis, y los dibujos animados de Los Simpson, entre otras marcas, aunque varios de esos contratos también habrían caducado.) Por esa época empezaron a conocerse las denuncias en contra de Hope Funds. Por esa época también Ibarra dejó el club para encargarse de coordinar la campaña presidencial de Macri junto a Marcos Peña y Horacio Rodríguez Larreta.
Proenter (Pro Entertainment S.A.) es un desprendimiento de la empresa TyC Sports fundada en los 90 por Carlos Avila, que arrancó en las oficinas de esa productora en la calle Balcarce y luego se mudó al edificio de DirectTV en la calle Marcelo T. de Alvear. Se trata de una sociedad entre el ex directivo de Torneos Javier Schmidt, CEO de la empresa, y su vicepresidente Eduardo Avila, hijo de Carlos. Schmidt y Avila a su vez son los apoderados de la offshore Gudere, por la cual han canalizado algunos negocios con empresas extranjeras, evitando que ese dinero ingrese al país. Según el sitio Opencorporates.com, otra empresa con el nombre Gudere, pero Holdings en vez de S.A., figura inscripta en el paraíso fscal de Panamá.
Además de Proenter e Ilmen, las otras dos empresas enumeradas como parte del “Grupo Hope Funds” por el grupo inversor son Sociedad Expansiva e Ideas Sports. Sociedad Expansiva S.A. tiene los mismos directores y el mismo domicilio que Proenter, Proenter Holdings e Ilmen (Schmidt, Avila, Sebastián Roca y Hernán García) y concentraría los negocios del grupo con la Confederación Argentina de Básquet y las selecciones de ese deporte. La otra empresa Ideas Sports, ubicada en la sede de la Productora Ideas del Sur en la calle Olleros, es presidida por Fabián Scoltore, mano derecha de Marcelo Tinelli, y estaría a cargo de los negocios con el voley. Existe una tercera empresa, Pro IDS (IDS por Ideas Del Sur), en la que comparten directorio Schmidt, Roca y García con Scoltore, Tinelli y su hija Micaela. Según varias fuentes públicas, la mitad de esa empresa pertenece a Tinelli-Scoltore y la otra a Proenter.
Según un artículo del 2 de diciembre del 2013 de Cancha Llena, el portal de deportes de Lanacion.com, el seleccionado argentino de vóleibol “es manejado comercialmente por Proenter, que posee cuatro accionistas: Javier Schmidt, Marcelo Tinelli, la financiera Hope Funds y Diego Avila, hijo del empresario Carlos”. En ese artículo, su autor Xavier Prieto cita al gerente de marketing de Proenter, Juan Diego García: “Marcelo tiene más interés y más incidencia que lo que parece”.
La sociedad Tinelli-Proenter tenía reservado un importante lugar en el esquema del desembarco del animador televisivo en el Fútbol Para Todos que se frustró en 2014, según dicen, por un veto de Máximo Kirchner y La Cámpora. “La nueva producción estará a cargo de una unión transitoria de empresas (UTE) registrada como Producción Deportiva (que forma la sigla Prode) y en la que IDS Sports (otra empresa de Tinelli, en sociedad con Pro Entertainment) y Torneos (firma conducida por Alejandro Burzaco) se asocian en partes iguales. De esa asociación no participará Ideas del Sur, la compañía de López”, anunciaba un artículo de José Crettaz en el diario La Nación en enero de ese año.
Según otro artículo de prensa, esta vez de Sabrina Santopinto y publicado en Infobae.com en septiembre del año pasado, una de la empresas de Tinelli-Scoltore, IDS Sports, figura en la investigación de la AFIP entre las beneficiarias de los fondos de origen dudoso aportados por Hope Funds. “Según la información aportada por la AFIP, los fondos captados fueron destinados a la inversión en emprendimientos inmobiliarios y la participación en sociedades comerciales como las firmas Imagen Deportiva SA, IDS Sports SA, Grileon SA, Vivir SA, SPES SA, Emprendimiento Recoleta, Pro Merchandising SA, Hope Funds Perú SA, New Viking Inv. Corp. y Auditorio Buenos Aires SA, entre otras”, dice el artículo, sin mencionar a Tinelli.
Blaksley, el CEO de Hope Funds, a su vez es socio en la empresa Musyka SA de Fernando Marín, otro ex Socma y actual coordinador de Fúbol Para Todos. Todos ellos, Macri, Tinelli, Marín y el presidente de Boca, Daniel Angelici, están entre los principales impulsores de la creación de una superliga profesional que concentre el negocio del fútbol entre los clubes más poderosos del país, un negocio potencialmente multimillonario. Lo que se dice un negocio Pro.
Después de los arreglos de Hope Funds con el Gobierno de la Ciudad, incuyendo la renovación express de la concesión de Buenos Aires Design a un precio de no creer, después de las promociones de Hope Funds del Gobierno de la Ciudad a través de megaeventos como la carrera entre Usain Bolt y el Metrobus, después de las inversiones en empresas Pro, incluyendo la de Tinelli; después de los negocios con Boca a través de Andrés Ibarra, la ruta Pro de los Panama Papers se pierde en medio de una constelación de personajes VIP del deporte y la farándula, clubes de campo, tango shows y bares temáticos de fama internacional.
Ya se sabe por dónde podría haber entrado y a dónde fue a parar. Ya se sabe quiénes le abrieron las puertas de Boca y del Gobierno de la Ciudad. Ya se sabe que estamos hablando de millones de dólares. Pero la duda persiste. ¿De dónde salió la plata?
Publicado en Página 12 el 29-5-16. Foto: Macri con Ibarra en la Casa Rosada
El fondo de inversión denunciado por lavado de dinero por la AFIP y luego por la Procelac (Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos) actualmente investigado por la Justicia Federal se llama Hope Funds. Su accionista principal y CEO es Enrique Blaksley. Su nombre figura en el centro de un entramado de más de 30 empresas offshore concentradas en Panamá y las Islas Vírgenes Británicas. Así surge de los documentos del estudio panameño Mossack Fonseca, que detectó y analizó Página/12 en el marco de la investigaciaón impulsada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung. Según las denuncias, Hope Funds no puede justificar el origen de sumas millonarias que ha invertido en distintas empresas porque muchos de sus inversores resultaron insolventes, no declararon y no podrían justificar el dinero que invirtieron. El año pasado, después de 18 allanamientos, Blaksley fue indagado por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado. La causa sigue abierta.
Hope Funds es un importante accionista de una empresa de marketing deportivo llamada Proenter. A partir del 2011, y hasta el año pasado, Proenter manejaba el merchandising del club Boca Juniors, primero a través de una empresa con ese nombre y después con otra llamada Ilmen. Ilmen tiene el mismo domicilio y los mismos directores que Proenter, pero distinta razón social. Mientras Proenter declara estar dedicada al mercadeo y la promoción de eventos y espectáculos, la razón social de Ilmen, según el boletín oficial de la ciudad, es la “comercialización de materiales de construcción”. Ese mismo año 2011 Hope Funds se convirtió en accionista de Proenter, participación que se extendió a Ilmen cuando ésta asumió los negocios con Boca. Blaksley, el CEO de Hope Funds, dijo al diario La Nación, en mayo de 2012, entrevistado por Carlos Masoni: “somo dueños del merchandising de Boca Juniors (todo menos la camiseta y la estática) y de la licencia de las escuelas de fútbol”. En marzo del 2015, un aviso promocional en el blog oficial de Hope Funds, blog.hopefunds.com, dejaba saber que Proenter e Ilmen forman parte del “Grupo Hope Funds” que maneja el fondo inversor. “Poseemos una importante plataforma de inversión. Una de las alternativas que ofrecemos se concentra en el rubro de entretenimiento, abarcando la realización de eventos, adquisición de derechos deportivos, licencias de marca y de merchandising, como así también en el rubro artístico y gastronómico. Además participamos en la producción de contenidos audiovisuales de calidad internacional. Las empresas de este rubro pertenecientes al grupo Hope Funds son: Pro Enter, para sus productos Sociedad Expansiva, dedicada a la explotación de los derechos comerciales de organizaciones e instituciones deportivas y culturales; Ideas Sport e Ilmen, empresa responsable de la comercialización de las licencias del club Boca Juniors”, dice el anuncio. El acuerdo duró hasta mediados del año pasado, cuando el club dejó de tercerizar la comercilización de sus licencias.
En ese tiempo Andrés Ibarra, Presidente de Marketing de Boca, era el máximo responsable de los negocios con Ilmen y Proenter. Ibarra, el ex gerente de Socma, Sideco, Correo Argentino y Autopistas del Sol del grupo Macri, ex polifuncionario del gobierno porteño bajo la jefatura de Mauricio Macri, había sido llevado a Boca en 2004 por el propio Macri, entonces presidente del club, para ocupar la gerencia general. En 2006 Ibarra llevó a Boca como jefe de Seguridad a Jorge “El Fino” Palacios, el ex comisario procesado por encubrimiento en la cuasa AMIA y primer jefe de la Policía Metropolitana creada por Macri. Casi al mismo tiemo fue acusado de llevar al espía Ciro James al Ministerio de Educación, donde Ibarra ocupaba una subsecretaría cuando fue contratado en esa dependencia el espía procesado junto a Palacios por escuchas ilegales. Tras su paso por la gerencia de Boca, Ibarra ascendió a la comisión directiva integrando listas del oficiaismo en sucesivas elecciones internas, desde donde se adueñó de la titularidad de la Comisión de Marketing con el aval del hoy presidente del Daniel Angelici, sindicado por Lilita Carrió como el operador judicial de Macri y del entonces tesorero Orlando Salvestrini, otro ex gerente del grupo Macri y a la vez ex presidente de Boca Crece SA, la empresa que manejó el merchandising en Boca hasta la llegada de Proenter. Aunque ocupó varios puestos importantes en el Gobierno de la Ciudad, de subsecretario a ministro, Ibarra siempre mantuvo la presidencia de Marketing en Boca, cuenta Jaime Rosemberg en un artículo del diario La Nación publicado en 2013. “Modificaron el estatuto para que con las firmas de Macri y la de él (Ibarra) se pudiera aprobar casi cualquier cosa”, lo criticó en ese texto el sindicalista y dirigente boquense opositor Roberto Digón, quien también le endilgó a Ibarra el manejo de la barrabrava.
Aunque la publicidad del merchandising de Boca sigue figurando de manera prominente y reiterada en la página web de Proenter (Pro-enter.com), la relación entre la empresa y el club habría terminado a mediados del año pasado, cuando Boca dejó de tercerizar y asumió la comercialización de sus licencias. “Las principales marcas deportivas de nuestro país nos eligen para el desarrollo de sus licencias de merchandising. En Argentina Boca Juniors representa el 70 por ciento del mercado en licencias deportivas”, destaca Pro-enter. (También dice representar a Newell’s Old Boys, Unión de Santa Fe, Los Pumas, los All Blacks, los Springbocks, las selecciones argentinas de voley y de básquet, los principales equipos de fútbol de Brasil, el campeoato argentino de Rally, las carreras de ciclismo La Doble Bragado y la Vuelta de San Luis, y los dibujos animados de Los Simpson, entre otras marcas, aunque varios de esos contratos también habrían caducado.) Por esa época empezaron a conocerse las denuncias en contra de Hope Funds. Por esa época también Ibarra dejó el club para encargarse de coordinar la campaña presidencial de Macri junto a Marcos Peña y Horacio Rodríguez Larreta.
Proenter (Pro Entertainment S.A.) es un desprendimiento de la empresa TyC Sports fundada en los 90 por Carlos Avila, que arrancó en las oficinas de esa productora en la calle Balcarce y luego se mudó al edificio de DirectTV en la calle Marcelo T. de Alvear. Se trata de una sociedad entre el ex directivo de Torneos Javier Schmidt, CEO de la empresa, y su vicepresidente Eduardo Avila, hijo de Carlos. Schmidt y Avila a su vez son los apoderados de la offshore Gudere, por la cual han canalizado algunos negocios con empresas extranjeras, evitando que ese dinero ingrese al país. Según el sitio Opencorporates.com, otra empresa con el nombre Gudere, pero Holdings en vez de S.A., figura inscripta en el paraíso fscal de Panamá.
Además de Proenter e Ilmen, las otras dos empresas enumeradas como parte del “Grupo Hope Funds” por el grupo inversor son Sociedad Expansiva e Ideas Sports. Sociedad Expansiva S.A. tiene los mismos directores y el mismo domicilio que Proenter, Proenter Holdings e Ilmen (Schmidt, Avila, Sebastián Roca y Hernán García) y concentraría los negocios del grupo con la Confederación Argentina de Básquet y las selecciones de ese deporte. La otra empresa Ideas Sports, ubicada en la sede de la Productora Ideas del Sur en la calle Olleros, es presidida por Fabián Scoltore, mano derecha de Marcelo Tinelli, y estaría a cargo de los negocios con el voley. Existe una tercera empresa, Pro IDS (IDS por Ideas Del Sur), en la que comparten directorio Schmidt, Roca y García con Scoltore, Tinelli y su hija Micaela. Según varias fuentes públicas, la mitad de esa empresa pertenece a Tinelli-Scoltore y la otra a Proenter.
Según un artículo del 2 de diciembre del 2013 de Cancha Llena, el portal de deportes de Lanacion.com, el seleccionado argentino de vóleibol “es manejado comercialmente por Proenter, que posee cuatro accionistas: Javier Schmidt, Marcelo Tinelli, la financiera Hope Funds y Diego Avila, hijo del empresario Carlos”. En ese artículo, su autor Xavier Prieto cita al gerente de marketing de Proenter, Juan Diego García: “Marcelo tiene más interés y más incidencia que lo que parece”.
La sociedad Tinelli-Proenter tenía reservado un importante lugar en el esquema del desembarco del animador televisivo en el Fútbol Para Todos que se frustró en 2014, según dicen, por un veto de Máximo Kirchner y La Cámpora. “La nueva producción estará a cargo de una unión transitoria de empresas (UTE) registrada como Producción Deportiva (que forma la sigla Prode) y en la que IDS Sports (otra empresa de Tinelli, en sociedad con Pro Entertainment) y Torneos (firma conducida por Alejandro Burzaco) se asocian en partes iguales. De esa asociación no participará Ideas del Sur, la compañía de López”, anunciaba un artículo de José Crettaz en el diario La Nación en enero de ese año.
Según otro artículo de prensa, esta vez de Sabrina Santopinto y publicado en Infobae.com en septiembre del año pasado, una de la empresas de Tinelli-Scoltore, IDS Sports, figura en la investigación de la AFIP entre las beneficiarias de los fondos de origen dudoso aportados por Hope Funds. “Según la información aportada por la AFIP, los fondos captados fueron destinados a la inversión en emprendimientos inmobiliarios y la participación en sociedades comerciales como las firmas Imagen Deportiva SA, IDS Sports SA, Grileon SA, Vivir SA, SPES SA, Emprendimiento Recoleta, Pro Merchandising SA, Hope Funds Perú SA, New Viking Inv. Corp. y Auditorio Buenos Aires SA, entre otras”, dice el artículo, sin mencionar a Tinelli.
Blaksley, el CEO de Hope Funds, a su vez es socio en la empresa Musyka SA de Fernando Marín, otro ex Socma y actual coordinador de Fúbol Para Todos. Todos ellos, Macri, Tinelli, Marín y el presidente de Boca, Daniel Angelici, están entre los principales impulsores de la creación de una superliga profesional que concentre el negocio del fútbol entre los clubes más poderosos del país, un negocio potencialmente multimillonario. Lo que se dice un negocio Pro.
Después de los arreglos de Hope Funds con el Gobierno de la Ciudad, incuyendo la renovación express de la concesión de Buenos Aires Design a un precio de no creer, después de las promociones de Hope Funds del Gobierno de la Ciudad a través de megaeventos como la carrera entre Usain Bolt y el Metrobus, después de las inversiones en empresas Pro, incluyendo la de Tinelli; después de los negocios con Boca a través de Andrés Ibarra, la ruta Pro de los Panama Papers se pierde en medio de una constelación de personajes VIP del deporte y la farándula, clubes de campo, tango shows y bares temáticos de fama internacional.
Ya se sabe por dónde podría haber entrado y a dónde fue a parar. Ya se sabe quiénes le abrieron las puertas de Boca y del Gobierno de la Ciudad. Ya se sabe que estamos hablando de millones de dólares. Pero la duda persiste. ¿De dónde salió la plata?
Publicado en Página 12 el 29-5-16. Foto: Macri con Ibarra en la Casa Rosada